Una grandísima final hemos vivido en Lugo, con dos equipos que tienen algunos de los proyectos de jugadores más interesantes del baloncesto español. El Gran Canaria llegó a Galicia como tercer clasificado de las islas y se va como subcampeón de España dejando algunos de los mejores momentos de baloncesto que se han visto en el torneo, a pesar de irse sin un oro que han tocado con los dedos.

El Real Madrid, sin embargo, ha sabido jugar ante equipos de menos nivel, ha sabido jugar ante equipos como el Joventut que tiraron de calidad y tiro exterior; y ha sabido jugar ante un Gran Canaria que dominó el marcador durante muchos minutos y que luchó de tú a tú en el apartado físico. Al final del tiempo reglamentario, el Real Madrid manejaba el partido con diferencias cortas (69-60 a falta de 4:19), pero el empuje del Gran Canaria con un parcial de 0-9 empataba el partido y lo llevaba a la prórroga.

En el tiempo extra, los amarillos controlaron el marcador con un gran Tchanda, pero en el último ataque el Real Madrid tuvo dos opciones desde el tiro libre, dos triples y dos canastas de dos. Ninguna de ellas, excepto la última de Mutambirwa, llegó a buen puerto, pero con la bocina marcando el final, el Real Madrid conseguía la victoria y un nuevo triplete (Junior, Cadete e Infantil) en el 2019.

REPRESENTACIÓN ARBITRAL CANARIA

Pero Canarias no estuvo representada sobre la cancha por equipos, sino también por el cuadro arbitral que tuvo la oportunidad de dirigir múltiples partidos durante el campeonato. Sin ir más lejos, Julio Rijo fue uno de los encargados de dirigir el partido por la tercera plaza entre Joventut y Barça Lassa junto al madrileño Marcos Fuentes, después de haber estado presente también en semifinales.